Uno de los sectores de enorme crecimiento en México y Latinoamérica son las Tecnologías de la Información, pero todavía la evangelización digital del uso de estas no permea a las pymes por completo, es muy largo el proceso de aceptación promedio, unos 5 o 6 meses para ser exactos a partir del emprendimiento o arranque del negocio, para empezar a explorar posibilidades de aplicaciones y redes sociales.
No es un tema de rezago o vacío legal, sino que la modernidad del uso de aplicaciones y sitios web, todavía es un problema en la carretera de la información digital para muchos negocios, dejando claro que las edades o conexión no es la barrera, sino es la implicación y el tiempo para atender las ofertas y demandas de productos, así como de servicios. No hay capacitación debida para ello de parte de los vendedores de plataformas tecnológicas.
Todos los negocios quieren vivir a su manera, sin estar insertados en la ola de la rutina de las aplicaciones y web sites, esperando buenos resultados comerciales. Los desafíos son individuales y como buenos emprendedores, hay que saber que no se va depender solo por el hecho de abrir el negocio, ya que hay que asumir acciones y retos implícitos de las tendencias del consumidor puestas por el mismo mercado: sino estas on line o interactuando en las redes sociales, simplemente no existes.
En China, una de las estrategias más recientes es el involucramiento entre el desarrollador tecnológico y el vendedor, concentrados ambos en el cliente, o sea analizando los modales de los consumidores de los productos o servicios para dar un resultado satisfactorio en todos los sentidos. Aunque a la mayoría no les gusta basarse en reglas y protocolos de ventas por internet.
Unas de las principales características de las Pymes chinas es que todas tienen plataformas tecnológicas y usan aplicaciones, por ello, se vuelven únicas en su rubro y son convertidas en polos de atracción, con sellos propios referidos sin importar si están asentados en algún centro comercial, un local, en la nube o en la calle, eso no importa, lo que vale es la interacción con los consumidores.
Las Pymes de México deben crear junto con los desarrolladores de aplicaciones, esquemas tecnológicos con características propias de los negocios basados en los giros comerciales y no solo en el uso de las tecnologías por simplemente vender, o sea, permitir críticas por la apariencia digital es válido; buscamos soluciones, no complicaciones. Siempre habrá clientes exigentes, por lo tanto, se debe explorar un sin números de posibilidades, así como bondades de los clientes, siempre intuyendo satisfacer y garantizar alegrías.
En la actualidad los métodos de pago influyen y determinan las sonrisas de los clientes, por eso en Asia muchas pymes se han centrado en el esquema de efectivo, monederos digitales o tarjetas en tiempo real, ya que el objetivo es hacer feliz al consumidor, más que ganar dinero; estrategia positiva para poder anclar clientes a mediano y largo plazo.
El mayor error detectado de las pymes en México y Asia, radica particularmente en el proceso del desarrollo de la aplicación digital, ya que casualmente un miembro de la familia se resiste a la migración tecnológica, porque simplemente no entienden el porque del cambio; no es problema generacional, sino de cultura del emprendimiento. Existe todavía la vieja escuela de satisfacer a los mismos clientes con más cosas y no buscar nuevas carteras.
Por lo anterior, una de las recomendaciones para contrarrestar este mal, es impulsar una serie de juegos lúdicos bajo el esquema de un programa inducido por parte del proveedor tecnológico para hacer valer y ver las bondades del uso de las tecnologías de la información.
De antemano el tema pyme goza de un gran arraigo a nivel mundial, particularmente en México y China, ya que son temas de Agenda Nacional en ambos países, por tener la transcendental característica de ser el principal polo generador de empleos y divisas, a la par, existen un sinnúmero de pymes mexicanas y chinas, que usan aplicaciones o sitios web, compartiendo muchas similitudes, tales como:
- La de vender experiencias en el marco de tradiciones y arraigo cultural
- Buscar que los sueños de emprendimiento sean realidad
- Los fuertes deseos de confiar en sí mismos y crecer
- Establecer una moda de consumo y exportarla
- Crear su propio estilo, y
- Generar un efectivo ecosistema de negocio sin competencias.
Hoy muchas empresas mexicanas pueden dar el salto, con la ayuda de la tecnología, bajo el cobijo de que la experiencia, hace la diferencia, un reconocimiento a Creaxid Innovación Web por dar muchas satisfacciones a pymes, emprendedores, negocios y prestadores de servicios.
Ricardo Chang.